En un auto fechado el 25 de septiembre, el juzgado número dos de Elche ha acordado la apertura de juicio oral contra todos los acusados, a petición del Ministerio Fiscal y considerando que "los hechos objeto de este proceso revisten caracteres de delito". Además, añade el auto, que de las "de las diligencias practicadas aparecen méritos suficientes para exigir la responsabilidad criminal a todos los acusados", que serán juzgados por la vía penal.
Los hechos se remontan a 2008 cuando los vecinos de una comunidad de propietarios de El Carabassí presentaron las primeras denuncias contra los ayuntamientos de Elche y Santa Pola por los elevados níveles de ruido que tenía el chiringuito denominado Embarcadero de Santa Lucía, ubicado junto a la ermita. La reclamación vecinal se fundamentaba en que los servicios municipales "no habrían desarrollado los actuaciones oportunas para garantizar el derecho al descanso nocturno de los residentes, al no haber evitado que este establecimiento de temporada", autorizado por la Junta de Gobierno Local con la condición específica de que la ambientación musical no podía molestar a los vecinos, "hubiera ajustado su funcionamiento nocturno a dicha condición en todo momento".
De esta manera, el Ayuntamiento de Santa Pola y de Elche fueron condenados en la vía contencioso-administrativa a indemnizar a los vecinos denunciantes con 124.000 euros. La vía penal siguió su camino. Fue archivada en primera instancia, pero posteriormente la Audiencia Provincial ordenó reabrirla y seguir con la causa, con lo que recayó en el juzgado número dos de Elche. Los vecinos de El Carabassí acusaban a los ayuntamientos de Santa Pola y Elche, «omisión de deberes y falta de control» ante el ruido generado por dos chiringuitos de playa que ejercían su actividad sin la licencia pertinente. Y es que los vecinos llamaban a la Policía Local, quienes levantaban acta, pero posteriormente no se tramitaban las denuncias y, por lo tanto, no había sanción administrativa para el chiringuito. Hay que recordar que el jefe de la Policía Local de Santa Pola es (ahora está de baja) José Miguel Zaragoza, hermano del entonces alcalde y ahora diputado provincial del PP.