Un nuevo archivo judicial que adelgaza aún más la que en su día tuvo dimensiones de megacausa. El Juzgado de Instrucción 2 de Pontevedra ha acordado el sobreseimiento de una pieza de la Operación Patos, relativa a obras dependientes de la Diputación Provincial de Pontevedra hechas en Fornelos de Montes y en Bembrive (Vigo). El juez da carpetazo al caso por "concurrir causa de extinción de la responsabilidad penal" por prescripción.
La Patos llegó a tener 50 investigados, pero la cifra en 2017 bajó a 13 en cinco piezas separadas, al margen del caso de Nigrán, que acabó con dos condenados a multas. Y una de las piezas, por obras dependientes de la Diputación, acaba de ser archivada, dejando libre de cargos a las tres personas que estaban investigadas: el número dos de la empresa Eiriña Jaime Alvariñas; el que fue jefe de gabinete del presidente de la Diputación, Luis Serantes; y el empresario José M. Carro Pellejero, administrador de Caldevergazo.
El fiscal pedía seguir adelante con la causa al ver la presunta autoría de un delito de alteración de precios en concursos y otro de falsedad documental. En el primer caso, el juez -que se hizo cargo del caso al inhibirse el juzgado de Vigo- estima que la conducta que relata la Fiscalía no se contempla en ese artículo, el 262, del Código Penal; y en relación a la supuesta falsedad, la ve prescrita. El auto no es firme y cabe recurso. Otra pieza de la Diputación en la que está imputado Rafael Louzán sigue en instrucción.